Quién te ha visto y quién te ve: Robert De Niro

Quién te ha visto y quién te ve

Intérpretes en horas bajas: Robert De Niro

No me dejáis otra opción. Ojalá la entrada más vista fuera alguna crítica reciente; o uno de los juegos sobre cine que os he propuesto. Pero no, lo más visto desde que creé el blog ha sido el reportaje sobre el ocaso artístico de Meg Ryan. Y como soy igualito que los magnates de Hollywood, quienes dan luz verde a secuelas sin ton ni son si ven que van a tener éxito; le doy al público lo que pide: carnaza.

El elegido para tomar el testigo de Nicolas Cage y de la protagonista de Tienes un email es ni más ni menos que Robert De Niro. Me odié a mí mismo por pensar en él cuando comencé a escribir esta sección. Habría sido mucho más fácil utilizar el recurso de Eddie Murphy, que siempre está ahí cuando lo necesitas.

Pero es que no me ha dejado otra opción. Aunque me caiga muy bien, sus últimas películas son para querer acabar como Thelma y Louise; no precisamente bien, vamos.

De Niro en Toro Salvaje

 Robert Anthony De Niro Jr. vino al mundo hace ya 69 añitos. Hijo de artistas (madre pintora/poeta y padre pintor/escultor) lo raro sería que hubiera decidido ser fontanero o médico. Tan interesado estaba en el cine que abandonó el instituto para estudiar actuación.

Fue Brian de Palma, director de Mission Impossible, El precio del poder, Los intocables de Elliot Ness y Carrie, quién le introdujo en la senda del éxito. Pero fue su papel en Malas Calles (Martin Scorsese, 1973), el que plantó la semilla de una exitosa carrera que todos hemos disfrutado.

Un año después sustituyó a Marlon Brando como Vito Corleone en El Padrino II, ganando el Oscar al mejor actor de reparto. Nacía una nueva estrella a pesar de su conocida timidez.

Sería injusto no reconocerle el mérito de haberse mantenido durante 25 años al máximo nivel. En ese cuarto de siglo estuvo nominado 4 veces más al Oscar y lo volvió a ganar como Actor principal por Toro Salvaje. 

 

Películas como Taxi Driver, El cazador, Los intocables de Elliot Ness, La misión, Uno de los nuestros, El cabo del miedo, Casino y Una Historia del Bronx (que él mismo dirigió), le convirtieron en una leyenda viva.

Incluso en la segunda mitad de los 90 participó en films menos valorados pero igual de exitosos como Heat, Copland, Sleepers, La habitación de Marvin y Ronin.

Pocos intérpretes pueden presumir de contar con una filmografía tan valorada por crítica y público.

Pero… siempre hay un pero en “quién te ha visto y quién te ve” y  esta vez coincide con el cambio de milenio. Con 56 años es raro que te sigan ofreciendo papeles interesantes y que te supongan un reto. Así que De Niro debió de pensar ¿qué diablos hago yo con mi carrera?. A la vista de sus trabajos desde entonces, está claro que no meditó bien la respuesta. 

Por no acertar, ni acertó apostando por el Partido Demócrata, ya que prestó apoyo explícitamente a Al Gore en las elecciones presidenciales del año 2000, y a John Kerry en las de 2004. Y ninguno ganó.

Nadie es perfecto (1999), Una terapia peligrosa (1999) y Los padres de ella (2000) supusieron el punto de inflexión en su filmografía. La primera fue un fracaso descomunal y posiblemente el 90% de los que estén leyendo estas líneas ni sabrán que existía dicha película. La segunda no es horrorosa, pero tampoco da para más. En cuanto a la tercera, incluso es una buena comedia, pero por su culpa existen esas terribles secuelas llamadas Los padres de él y Ahora los padres son ellos. 

 Tres comedias que cambiaron para siempre el rumbo de su carrera

Si ves este póster, ¡huye!

Pero nada comparado con la que posiblemente sea la más horrible tortura que uno puede sufrir viendo un largometraje de Robert De Niro: Las aventuras de Rocky y Bullwinkle.  Si te atreves a echarle un vistazo, por favor comparte tu opinión con el resto. Bastante que no acabó con su carrera de un plumazo.

Recuperado del trauma de hacer de villano contra un reno y una ardilla, el actor se abonó a la mediocridad hasta el día de hoy. 

En los últimos diez años se pueden contar con los dedos de una mano los films suyos que merecen la pena. Hombres de Honor, Stardust, Sin límites, El buen pastor y Luces rojas no son obras maestras, pero se pueden considerar buenas si se comparan con el resto. De hecho, en la mayoría de ellas, De Niro es secundario. Quién lo iba a decir allá por los años 70, 80 y 90. Una auténtica desgracia.

Noche de Fin de año consiguió engatusar a De Niro y Halle Berry

No creáis que me olvido de comentar el resto de "trabajitos" en los que se vió involucrado durante los primeros compases del tercer milenio.  Sólo espero y deseo que le ayudaran a pagar las facturas del mes. 

Otra terapia peligrosa ¡Recaída Total! Se rodó en 2002 aunque nadie lo había pedido. En esos meses también se estrenó Showtime acompañado por… atención… ¡Eddie Murphy!. Si cuando os digo que le tengo manía es por algo. Estoy convencido de que aceptó el papel para hundir la carrera de nuestro querido actor.

A estas dos obras maestras hay que añadir, entre 2004 y 2012, películas que espero que nunca veáis como El escondite, El enviado, El puente de San Luis Rey, Asesinato justo, las ya citadas secuelas de Los padres de ella, Stone, Noche de fin de año y Freelancers. Ésta última ni siquiera creo que llegue nunca a los cines españoles, gracias a dios.

  

Si habéis visto más de la mitad de estas películas, entenderéis por qué el actor protagoniza esta entrada

Como dato informativo, el protagonista de Taxi driver creó en 2002 el festival de cine de Tribeca de Nueva York, para revitalizar dicho barrio tras el 11 de septiembre de 2001. Quizás ha estado más centrado en sacar adelante este proyecto que en mantener su carrera. Ojalá esa sea la causa por la cual ya nunca disfrutamos de su mejor versión en pantalla grande.

Pero como dije unos párrafos más arriba, se trata de una leyenda del séptimo arte y como bien sabréis las leyendas nunca mueren.