lunes, 6 de mayo de 2013

¡Ese personaje pudo ser mío!


¡Ese personaje pudo ser mío!



Actores que dejaron pasar papeles destacados

 

 



A lo largo de la historia del cine son numerosos los personajes que se han quedado en nuestra retina... y más aún los que hemos olvidado. Lo que muchas veces no se sabe es que esos mismos personajes pudieron haber sido diametralmente opuestos si los hubiese encarnado el actor o la actriz inicialmente previstos. En ocasiones un personaje parece hecho a medida de quien lo interpreta, pero incluso en este supuesto uno se entera de que el actor elegido ni siquiera era la primera opción. 
¿Qué habría pasado, por ejemplo, con la carrera de Stuart Townsend si no hubiera sido despedido poco después de comenzar el rodaje de La Comunidad del Anillo, en la cual interpretaba a Aragorn?
¿serían Magneto y Gandalf completamente diferentes si Ian Mckellen no hubiera podido encarnarlos por culpa de haber aceptado hacer de Dumbledore en Harry Potter?
Pues amigos míos, estos dos casos son sólo el principio de una larga lista de decisiones arriesgadas y/o erróneas por parte de los actores, entre las que destacan:









Tom Selleck - Indiana Jones (Indiana Jones)


Comenzamos con uno de lo casos más conocidos y más flagrantes para el actor en cuestión. Puede que no sepáis si quiera quién es Tom Selleck, lo que sería muy extraño si hubiera podido aceptar una oferta que en su día quizás no pareció tan suculenta como parece. Allá por principios de los 80, Selleck triunfaba con la serie Magnum P.I., teniendo que rechazar un rol como arqueólogo que le ofreció Steven Spielberg. Si Sandro Rey hubiera pasado por allí en ese momento, seguramente le habría advertido del error que estaba cometiendo. Y le habría dado bendiciones y buenas noches.
Pero el pasado no se puede cambiar y fue finalmente Harrison Ford quien se llevó el gato al agua. Tom Selleck nunca llegó a convertirse en una estrella, aunque le queda el consuelo de haber formado parte de Friends como novio de Mónica.



Al Pacino - Han Solo (Star Wars)


Otra vez Harrison Ford se vio beneficiado de rebote. Puede que si Tom Selleck y Al Pacino no le hubieran allanado el camino, Blade Runner fuera su film más exitoso... y eso que fracasó en su día. O incluso es probable que nunca hubiera llegado ni a rodar con Ridley Scott.
El caso es que con el rol de Han Solo, Al Pacino le dio calabazas a George Lucas porque le espantó la cantidad de fantasía que contenía el guión. En su lugar, decidió rodar Bobby Deerfield, que aunque os diga su título en castellano (Un instante, una Vida), seguramente ni os suene. Decisión equivocada aunque intrascendente, habida cuenta de que El Padrino ya formaba parte de su prestigiosa filmografía.  



Michael Madsen - Vicent Vega (Pulp Fiction)


Michael Madsen es reconocido principalmente por sus apariciones en títulos de Quentin Tarantino. Bueno, y porque salía en Liberad a Willy, aunque este dato es un poco más friki. Problablemente se hubiera estado hurgando las fosas nasales sin la ayuda del director de Malditos bastardos. Y tampoco es que haya llegado nunca a despuntar. 
Me da a mí que otro gallo habría cantado si hubiera aceptado salir en Pulp Fiction. Pero no, el muy zoquete se decantó por Wyatt Earp, un western que se llevó palos por todas partes y del que no mucha gente se acuerda. Creo que Pulp Fiction sí que es un poquito más recordada y sólo un pelín más valorada...
Dicen las malas lenguas que esa decisión hizo que Tarantino y Madsen estuvieran 7 años sin hablarse.


John Travolta - Forrest Gump (Forrest Gump)


Lo comido por lo servido, John. Consuélate con que te hiciste un hueco en Pulp Fiction cuando lo más probable es que no hubiera sido así. Ahora, imperdonable lo de rechazar un papel tan icónico como el del hombre de buen corazón que decía eso de la vida es como una caja de bombones, nunca sabes lo que te va a tocar. 
Al menos ha manifestado su arrepentimiento por dejar pasar semejante oportunidad. Tom Hanks todavía estará regocijándose en su sillón.


Will Smith - Neo (Matrix)



El príncipe de Bel Air es sólo uno de los 6 o 7 intérpretes que pudieron tomarse la pastilla roja antes que Keanu Reeves. Me consuela saber que éste último no era la primera opción para abordar a Neo. ¡Qué soso es, la virgen!
La excusa que pone Will Smith a la hora de explicar su negativa es que no entendió bien el concepto del largometraje y que la habría cagado haciendo del elegido.
Mentira Cochina, hablando mal y pronto. Sino... ¿alguien me puede explicar por qué sí que entendió la horrorosa Wild Wild West, la cual se estrenó el mismo año que Matrix?



Tom Cruise - Eduardo Manostijeras (Eduardo Manostijeras)





Su carrera no echa de menos ningún éxito salvador o cintas de prestigio. Sin embargo resulta gracioso pensar cómo hubiera sido Eduardo Manostijeras en la piel de Tom Cruise. La versión más escuchada es que no le gustó que el protagonista fuera tan poco varonil. 
Aquí es cuando algunos dirán eso de dime de lo que presumes y te diré de lo que careces. Y ya de paso nos recordarán lo de la placenta de su hija.


Tom Hanks - Andy Dufrasne (Cadena Perpetua)


Qué grande es nuestro náufrago preferido. Si es que hasta rechazando papeles acierta. ¿Por qué? Básicamente porque tuvo que elegir entre Forrest Gump y Cadena Perpetua y... ¿Qué habría sido de nosotros sin aquél que no dice tonterías?
Seguramente le dolió tomar esta difícil decisión, pero el actor estaba demasiado comprometido con Robert Zemeckis y tuvo que decir que no.
Lo curioso es que en 1994 Forrest Gump arrasó en los Oscar dejando a Cadena Perpetua sin un sólo premio. ¿Habría pasado lo mismo si Hanks hubiera aparecido en ambas películas?



Bruce Willis - Sam Wheat (Ghost)


Menudo shock para los amantes de John McClane ver a Bruce Willis en un film tan pasteloso y romántico como Ghost. El actor republicano consideró que era un poco rarito eso de hacer de fantasma... hasta que llegó el Sexto Sentido y cambió totalmente de opinión. 
En cambio Demi Moore, su mujer por aquél entonces, si se involucró en una de las películas de amor más exitosas de todos los tiempos. 



Mel Gibson - Máximo Décimo Meridio (Gladiator)



Después de dar la campanada con Braveheart, Ridley Scott no dudó a la hora de telefonear a Mel Gibson para que se hiciera pasar por un esclavo hispano. No pensó que el actor se echaría para atrás por considerar que era muy mayor para dicho rol y que no estaba al nivel físico exigido. 
Viendo que al mismo tiempo aceptó ser El Patriota, mis dudas tengo de que no se tratara de una excusa barata. Lo único que está claro es que en esta ocasión, el eco en la eternidad lo tiene Russell Crowe.




Jack Nicholson - Michael Corleone (El Padrino)



Mr Nicholson es y será una leyenda viva del cine pase lo pase. Ahora bien, si se hubiera atrevido a meterse en la piel del hijo de Vito, su aura de estrella sería aún más grande todavía. Según el Joker original, era demasiado viejo para afrontar ese papel. 
La buena noticia es que gracias a su decisión, un por entonces poco conocido Al Pacino tuvo la oportunidad de su vida. Gracias Jack. ¿No hubo ninguna actriz que rechazara el papel de Mary Corleone? porque si así es, eso si que sería una mala noticia.





Liam Neeson - Abraham Lincoln (Lincoln)



 
Más que rechazo podríamos hablar de hartazgo. El proyecto de Steven Spielberg estuvo dando vueltas desde 2005 y Neeson acabó hartándose de esperar. Además, tanto darle vueltas a un proyecto de estas dimensiones acabó por mermar la confianza del actor en sus posibilidades, considerando que era demasiado viejo para encarnar a tan importante presidente. Pero lo cierto es que su colega Daniel Day Lewis es sólo tres años más joven. 
Dicen que cuando se enteró de que este último había rechazado a Spielberg, le llamó para convencerle de lo contrario. Claro que lo mismo cuentan del propio Spielberg o de Leonardo Dicaprio. Si todo eso es verdad, menudo asedio tuvo que sufrir el último mohicano.    



 
Daniel Day Lewis - Aragorn (El señor de los anillos)


Si el oscarizado actor hubiera estado involucrado en la trilogía de Peter Jackson, es probable que algún Oscar hubiera ido a parar a su reparto. Pero no pudo ser, sobretodo porque Lewis es conocido por no tener prisa a la hora de encandenar un rodaje con otro. Seguramente la sola idea de hacer tres films seguidos le provocaron mareos y sudores.
Aun así, parece que el director de El Hobbit fue bastante pesadito e insistió una y otra vez sin éxito alguno. Da igual, Viggo Mortensen convirtió al montaraz en un personaje mítico.


 
Jim Carrey - Jack Sparrow (Piratas del Caribe)


 Quién iba a pensar que Jack Sparrow no nació con Johnny Depp del vientre de su madre. Mucha gente será incrédula al hecho de que el papel le fue ofrecido antes a Jim Carrey. ¡Dios Santo! estarán gritando muchos. 
Si os habéis recuperado ya, tendréis que reconocer que queda fuera de toda duda la capacidad de Ace Ventura para convertir a sus personajes en caricaturas andantes. El problema es que su interpretación seguramente se hubiera salido de madre y  nos hubiera recordado a un payaso de feria. Y eso que el pirata de Johnny Depp perfectamente podría haberse colado en A Wong Foo, gracias por todo Julie Newmar. Menudo título espantoso, por cierto.




Brad Pitt - Jason Bourne (El caso Bourne)



Eternamente agradecido como los muñecos de Toy Story debe de estar Matt Damon a su colega en Ocean's Eleven. Sí, ya sé que el protagonista de El indomable Will Haunting tenía una carrera sólida antes de meterse en la piel del amnésico agente, pero eso no quita para que la trilogía de Bourne le ayudara a consolidarse en lo más alto. Tampoco creo que Brad Pitt llorara por las esquinas viendo como fracasaba la culpable de todo: Spy Game, película que hizo que rechazara este papel. A lo sumo le impidió comprar una o dos mansiones más.




Sean Connery - Gandalf (El señor de los anillos) / Hannibal Lecter (El silencio de los corderos) / Morpheo (Matrix)




Como colofón, un actor que se ha dedicado a decir NO a diestro y siniestro. Para empezar, de nada sirvió que Peter Jackson le rogara que se convirtiera en Gandalf (un poco arrastrado este Jackson). Ni tan siquiera los 6 millones de dólares que le ofrecieron por película fueron suficientes. Según el mítico James Bond, a día de hoy sigue sin entender El Señor de los anillos. ¡Qué más da eso Sean! Si te ofrecen una millonada, aceptas sin rechistar y haces lo que te pidan. Ya lo entenderán otros por ti.
Esta negativa es considerada una de las peores decisiones de la historia, pues se calcula que Connery dejó de ingresar 450 millones de dólares (se habría llevado un 15% de lo que ingresó la trilogía en taquilla... y fueron uno cuantos milloncejos).
La cosa no se queda ahí. El actor tampoco entendió un pimiento de Matrix y se unió a Will Smith en eso de dar calabazas a los Wachowski. Una pena pues hubieramos disfrutado de un Morpheo legendario. 
Y qué decir de El Silencio de los Corderos. De nuevo, un papel mítico que no entusiasmó al escocés. En este caso nos da igual porque Antonhy Hopkins lo clava. Lo raro es que sí que le interesó aparecer en La Liga de los Hombres Extraordinaros...

 



No hay comentarios:

Publicar un comentario