Apuntando Maneras
Intérpretes camino del estrellato: Michelle Williams
La de vueltas que da la vida. Cuando en 1998 se estrenó en televisión Dawson Crece, muy pocos podían augurar que la que sacaría mayor beneficio de su participación en ella sería Jen, la más borde de todos los personajes. ¿Y quién interpretaba a dicha jovencita? Pues si no fuera Michelle Williams básicamente todo lo que os acabo de contar no vendría a cuento. Pero sí, a pesar de que le tocó hacer de "mala" y vio como Katie Holmes, James Van Der Beek y Joshua Jackon se repartían el pastel de la fama, la actriz hizo honor a eso de "quien ríe último ríe mejor" y esperó su momento pacientemente.
La señorita Ingrid (ése es su segundo nombre) puede estar orgullosa de haber conseguido destacar sin ser especialmente guapa ni atractiva según los cánones que se manejan por Hollywood. Claro, que todo es relativo, pues depende de los ojos que miren a la muchacha.
Nacida hace 32 años, es la mayor de 5 hermanos. Sus antepasados son noruegos, lo que explica que ni en verano consiga ponerse un poquito morena.
Su pinta de niña bien, que no ha roto un plato en su vida, no concuerda para nada con la realidad. Aunque su vida privada es bastante desconocida (lo que seguramente agradecen sus fans a la hora de verla en pantalla) se sabe que cuando tenía sólo 15 años pidió formalmente la emancipación de sus padres para desarrollar su carrera como actriz sin tener detrás de la oreja a sus progenitores, quienes pensaban que era un error.
Aunque fíate tú de su padre. Le parece una equivocación que su hija quiera ser actriz pero cree que es estupendo que se dedique a practicar Trading con 16 años. ¿Y qué leches es eso del Trading? Pues mis amplios conocimientos me permiten deciros que es una práctica de compra y venta de activos en un mercado financiero y... bla, bla, bla. Hasta yo me duermo escribiéndolo. Únicamente era el dato que necesitaba para contar que Williams ganó miles de dólares con este método bursátil antes de llegar a la mayoría de edad.
Parece ser que no era suficiente y el gusanillo de la interpretación seguía picando insistentemente a Michelle. Después de debutar en Lassie (sí, la película del perro) apareció como la versión joven de Natasha Henstridge en Species, haciendo de alien sexy con no muy buenas intenciones.
Como la cosa no es que avanzara en la buena dirección que se diga, decidió mudarse a Los Ángeles en 1997 y poco tiempo después le llegó la gran oportunidad de su vida: Dawson Crece. Durante 5 años estuvo dándolo todo en el dramón adolescente. Y por sus últimas declaraciones parece que no le importaría ni mucho menos volver a reunirse con sus compañeros de la pequeña pantalla. A juzgar por las carreras de Katie Holmes y James Van Der Beek, mal no les vendría.
Acabada esa etapa comenzó a despuntar en el cine independiente con El mundo de Leland, donde compartía protagonismo con Ryan Gosling; o Vías Cruzadas, donde la acompañaba un todavía semidesconocido Peter Dinklage, Tyron Lannister en Juego de Tronos... el enano, vaya.
Pero si Dawson Crece fue su catapulta en televisión, el film que la lanzó definitivamente en la gran pantalla fue Brokeback Mountain, que le dejó de paso una nominación al Oscar. Además, allí conoció a Heath Ledger, con quien tuvo un hijo antes de separarse 3 años después. Al poco tiempo el actor murió de sobredosis, aunque sigue habiendo mil teorías al respecto. Este hecho a punto estuvo de retirar a nuestra protagonista, quién se replanteó su existencia después del shock que le supuso el fallecimiento del Joker aun cuando ya no eran pareja.
Y encima tampoco es que después de la película de Ang Lee todo haya sido coser y cantar. Después de su nominación, Michelle ha continuado trabajando sin parar... pero la mayoría de las veces como secundaria. Al menos hasta 2010.
En ese rol menor destacan sus participaciones en Shutter Island, haciendo de la mujer un tanto inestable de Leonardo DiCaprio; y I'm Not There, un homenaje a Bob Dylan en el que también aparecía Heath Ledger en uno de sus últimos trabajos.
Su talento tarde o temprano tenía que convertirla en protagonista y así fue. Blue Valentine, (de nuevo con Ryan Gosling) y Mi Semana con Marilyn no fueron grandes éxitos debido a su carácter independiente pero le dejaron dos nuevas nominaciones al Oscar y un Globo de Oro por encarnar a la mítica Marilyn Monroe.
Su último largometraje estrenado ha sido Oz, un Mundo de Fantasía, demostrándonos que también se puede subir al carro de las superproducciones. Y ha dado en la diana puesto que ha resultado ser un éxito. Más allá de este año no tiene casi proyectos en cartera, pero no es para preocuparse porque tenemos actriz para rato... y de Oscar, por lo que parece. Tiembla Kate Winslet.
Su pinta de niña bien, que no ha roto un plato en su vida, no concuerda para nada con la realidad. Aunque su vida privada es bastante desconocida (lo que seguramente agradecen sus fans a la hora de verla en pantalla) se sabe que cuando tenía sólo 15 años pidió formalmente la emancipación de sus padres para desarrollar su carrera como actriz sin tener detrás de la oreja a sus progenitores, quienes pensaban que era un error.
Aunque fíate tú de su padre. Le parece una equivocación que su hija quiera ser actriz pero cree que es estupendo que se dedique a practicar Trading con 16 años. ¿Y qué leches es eso del Trading? Pues mis amplios conocimientos me permiten deciros que es una práctica de compra y venta de activos en un mercado financiero y... bla, bla, bla. Hasta yo me duermo escribiéndolo. Únicamente era el dato que necesitaba para contar que Williams ganó miles de dólares con este método bursátil antes de llegar a la mayoría de edad.Parece ser que no era suficiente y el gusanillo de la interpretación seguía picando insistentemente a Michelle. Después de debutar en Lassie (sí, la película del perro) apareció como la versión joven de Natasha Henstridge en Species, haciendo de alien sexy con no muy buenas intenciones.
Como la cosa no es que avanzara en la buena dirección que se diga, decidió mudarse a Los Ángeles en 1997 y poco tiempo después le llegó la gran oportunidad de su vida: Dawson Crece. Durante 5 años estuvo dándolo todo en el dramón adolescente. Y por sus últimas declaraciones parece que no le importaría ni mucho menos volver a reunirse con sus compañeros de la pequeña pantalla. A juzgar por las carreras de Katie Holmes y James Van Der Beek, mal no les vendría.
Acabada esa etapa comenzó a despuntar en el cine independiente con El mundo de Leland, donde compartía protagonismo con Ryan Gosling; o Vías Cruzadas, donde la acompañaba un todavía semidesconocido Peter Dinklage, Tyron Lannister en Juego de Tronos... el enano, vaya. Pero si Dawson Crece fue su catapulta en televisión, el film que la lanzó definitivamente en la gran pantalla fue Brokeback Mountain, que le dejó de paso una nominación al Oscar. Además, allí conoció a Heath Ledger, con quien tuvo un hijo antes de separarse 3 años después. Al poco tiempo el actor murió de sobredosis, aunque sigue habiendo mil teorías al respecto. Este hecho a punto estuvo de retirar a nuestra protagonista, quién se replanteó su existencia después del shock que le supuso el fallecimiento del Joker aun cuando ya no eran pareja.
Y encima tampoco es que después de la película de Ang Lee todo haya sido coser y cantar. Después de su nominación, Michelle ha continuado trabajando sin parar... pero la mayoría de las veces como secundaria. Al menos hasta 2010.
En ese rol menor destacan sus participaciones en Shutter Island, haciendo de la mujer un tanto inestable de Leonardo DiCaprio; y I'm Not There, un homenaje a Bob Dylan en el que también aparecía Heath Ledger en uno de sus últimos trabajos.
Su talento tarde o temprano tenía que convertirla en protagonista y así fue. Blue Valentine, (de nuevo con Ryan Gosling) y Mi Semana con Marilyn no fueron grandes éxitos debido a su carácter independiente pero le dejaron dos nuevas nominaciones al Oscar y un Globo de Oro por encarnar a la mítica Marilyn Monroe.Su último largometraje estrenado ha sido Oz, un Mundo de Fantasía, demostrándonos que también se puede subir al carro de las superproducciones. Y ha dado en la diana puesto que ha resultado ser un éxito. Más allá de este año no tiene casi proyectos en cartera, pero no es para preocuparse porque tenemos actriz para rato... y de Oscar, por lo que parece. Tiembla Kate Winslet.
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